El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Guatemala y la Universidad Rafael Landívar a través de la Vicerrectoría de Investigación y Proyección (VRIP) presentan el estudio «Tasa de fecundidad de mujeres y adolescentes en Guatemala, año 2018: diferencias asociadas al contexto socioeconómico». Este documento es el resultado de un trabajo colaborativo entre ambas instituciones que busca, desde un enfoque de derechos humanos, promover el análisis y discusión sobre la salud reproductiva, la igualdad de género y la generación de estadísticas para la toma de decisiones basadas en evidencia.
En 1994, el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD) reconoció que promover la igualdad de género, fomentar el empoderamiento de las mujeres y velar por que estas pudieran tomar las decisiones acerca de su fecundidad tenían que ser los ejes centrales de las políticas de población y desarrollo. En esa línea, todo debate sobre cuestiones demográficas debe partir de esos derechos. Por eso mismo, es necesario promover acciones encaminadas a llevar a la práctica la autonomía corporal y respaldar la salud y derechos reproductivos para todas las personas, particularmente las mujeres, que son los pilares de la igualdad plena, la dignidad y las oportunidades.
En el caso de Guatemala, para la formulación de política pública en beneficio del desarrollo de la población es necesario entender el contexto y las variaciones en la tasa global de fecundidad; por cuanto esta tasa estima los nacimientos que se esperan en una sociedad, pero, más allá de ser un indicador demográfico, provee información sobre el desarrollo social del país y el ejercicio de los derechos reproductivos de las mujeres.
En las últimas décadas Guatemala ha vivido una reducción en la tasa global de fecundidad. Sin embargo, las realidades son distintas dependiendo de la situación económica, el nivel de educación y el origen étnico de las mujeres. Los hallazgos de este estudio ilustran la persistencia de algunos retos como la alta tasa de embarazos en adolescentes, situación que tiene un impacto en la educación y las oportunidades de desarrollo de las jóvenes.
Frente a esta situación, la salud reproductiva cobra mucha relevancia y debe ser abordada como un tema prioritario en la agenda pública. Si bien el Estado de Guatemala ha avanzado en la construcción de un marco legal, de políticas y programas que la garanticen, se sigue necesitando un trabajo conjunto entre actores nacionales de gobierno, instituciones internacionales, academia y sociedad civil para hacer una realidad el ejercicio de los derechos reproductivos de la población, y en especial de las mujeres y jóvenes de Guatemala.
La alianza de la VRIP y el UNFPA se incorpora a estos esfuerzos reconociendo la necesidad de generar información de calidad, mediante métodos rigurosos, que aporten a la toma de de decisiones basada en evidencia.
El vínculo entre las tasas de fecundidad en adolescentes, medidas mediante las tasas específicas de fecundidad de 10 a 14 años y de 15 a 19, con indicadores de condiciones de vida, educación y economía provee argumentos para problematizar las condiciones.
Nuestra apuesta es producir conocimiento y evidencia en el ámbito de la salud reproductiva que contribuya al debate constructivo y a generar propuestas que se traduzcan en políticas públicas que logren hacer un cambio positivo en la vida de la población guatemalteca.
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