ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS, Nueva York/CIUDAD DE GUATEMALA, Guatemala – “Sabemos que cuando invertimos en la juventud, especialmente en las niñas adolescentes, estamos haciendo una de las inversiones más inteligentes que un país puede hacer”, dijo el Dr. Babatunde Osotimehin, director ejecutivo del UNFPA, en una reunión de alto nivel acerca de la promoción de los derechos de las niñas adolescentes, celebrada hoy en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Señaló que “Guatemala está brindando un exclusivo ejemplo a seguir”.

Los esfuerzos coordinados entre los ministerios del gobierno, socios y la sociedad civil de Guatemala, están reduciendo los embarazos entre las adolescentes, mejorando el acceso a la salud y la educación, y protegiendo a las niñas contra el abuso sexual. A través de un acuerdo firmado hoy en el evento, estos esfuerzos servirán como modelo para otros países en la región.

Guatemala tiene una alta tasa de natalidad entre adolescentes, 92 nacimientos por cada 1,000 niñas con edades entre 15 y 19 años. El embarazo entre las adolescentes está estrechamente vinculado a la vulnerabilidad de las niñas. La pobreza, la violencia sexual, el matrimonio infantil, la desigualdad de género y la exclusión de la educación son todos factores que impulsan el embarazo de las adolescentes.  

Y el embarazo de las adolescentes también produce vulnerabilidad: Las complicaciones durante el embarazo y el parto son una de las principales causas de muerte entre las adolescentes y, por otra parte, las niñas que quedan embarazadas tienen una mayor probabilidad de abandonar la escuela, poniendo en peligro sus perspectivas futuras.  

“Los embarazos entre las adolescentes no son solamente un problema de salud, sino un problema de desarrollo”, dijo Roxana Baldetti Elías, vicepresidenta de Guatemala.

Pero pronto agregó, “en algún momento, el círculo vicioso tiene que convertirse en un círculo virtuoso”.

Sentar las bases para el cambio

Con mucha frecuencia, las niñas que buscan ayuda médica después de quedar embarazadas o de sufrir violencia sexual, enfrentan ultraje y humillación, señaló la vicepresidenta. “Estos casos se deben tratar con sumo cuidado y de una manera digna”.

Agregó, los nuevos lineamientos se crearon para ofrecer cuidado sensitivo a las niñas embarazadas y a las niñas sobrevivientes de la violencia. Y para abordar las altas tasas del país con respecto a la violencia basada en género, “Guatemala implementó una ley que trata los embarazos de las adolescentes menores de 14 años, como casos de violación sexual”. 

El gobierno y sus socios también comenzaron a proporcionar un paquete integrado de servicios para proteger la salud y los derechos de las niñas. Por ejemplo, el programa exige que las niñas embarazadas reciban una gama completa de servicios así como también ayuda para continuar sus estudios. Los casos de abuso sexual también se reportan para entablar procesos judiciales.  

El UNFPA está apoyando a muchas de las partes de este esfuerzo coordinado. Por ejemplo, el programa del UNFPA Abriendo Oportunidades, ofrece espacios seguros, capacitación en habilidades esenciales para la vida y otros servicios a las niñas en comunidades rurales e indígenas. El UNFPA también apoyó la nueva política nacional del gobierno para la juventud que consiste en el establecimiento de un Gabinete Nacional de la Juventud y el lanzamiento de PLANEA, un plan nacional para prevenir el embarazo en la adolescencia.  

“Sentamos las bases y estamos viendo algunos resultados”, dijo la vicepresidenta Baldetti.

Empoderar a la juventud

La juventud también puede desempeñar un papel fundamental para hacer realidad estos cambios positivos – especialmente cuando conoce sus derechos.

El Consejo Nacional de la Juventud y PLANEA están creando conciencia acerca de los derechos de los jóvenes a la dignidad, la libertad  contra la violencia e información sobre salud reproductiva.  

Facilitar información acerca de la salud reproductiva puede resultar controversial, reconoció Siomara Elizabeth Morales, una joven miembro de 20 años de edad del Consejo Nacional de la Juventud en la Ciudad de Guatemala. “Algunas veces la comunidad critica, pero otras veces dicen que es bueno brindar educación acerca de PLANEA”. 

“Es nuestro derecho a participar”, dijo Siomara Elizabeth Morales, una joven miembro del Consejo Nacional de la Juventud en Guatemala.

En sus talleres para jóvenes, “también escuchamos las experiencias que han tenido que vivir las niñas y adolescentes. En las actividades, todos se pueden expresar, se pueden informar y aprender qué deben hacer en una situación de riesgo”.  

Según la Srta. Morales, la meta final para las jóvenes es empoderarse y defenderse por sí mismas y alcanzar su potencial. Dijo “Es nuestro derecho a participar”.  

Cuando las jóvenes como la Srta. Morales están empoderadas, a todos nos espera un mejor futuro, señaló el Dr. Osotimehin en el evento en Nueva York.

Agregó “Los jóvenes, especialmente las niñas adolescentes, pueden romper el ciclo de la pobreza, fortalecer el tejido social y crear un futuro sostenible”.

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