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5 de mayo de 2016. En este Día Internacional de la Partera el UNFPA, el Fondo de Población de las Naciones Unidas, saluda la contribución que hacen las parteras para salvar la vida de mujeres, niñas adolescentes y recién nacidos en circunstancias muy difíciles en ocasiones, en comunidades de difícil acceso, en emergencias humanitarias y en países frágiles y desgarrados por conflictos.

Las parteras capacitadas y con apoyo están en buena posición para prestar en las comunidades atención compasiva, respetuosa y pertinente a las características culturales que una mujer necesita durante el embarazo y el parto. La atención de las parteras es igualmente importante durante el crítico primer mes de vida, y constituye una importante contribución a la salud sexual y reproductiva en general.

Las parteras son, por lo tanto, esenciales para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En los últimos 25 años el mundo ha logrado reducir casi a la mitad las muertes maternas, pero cada año mueren todavía unas 300.000 mujeres durante el embarazo o el parto, y casi 3 millones de niños no sobreviven las primeras cuatro semanas de vida. Una gran mayoría de esas muertes prevenibles ocurren en países en desarrollo y afectados por crisis. Si se despliega gran número de parteras capacitadas se pueden evitar unos dos tercios de esas muertes. Es esencial hacer inversiones importantes en la formación de parteras si se han de lograr los ambiciosos objetivos de reducir las muertes maternas y de recién nacidos.

UNFPA está ayudando a capacitar y apoyar a miles de parteras en más de 100 países. Una encuesta reciente estimó que en 57 de esos países el UNFPA ha capacitado a 66.000 parteras en los últimos siete años. Ese importante apoyo respecto de las encargadas de atención de la salud puede ayudar a más de 11 millones de mujeres a dar a luz en condiciones seguras todos los años, pero es necesario hacer mucho más.

En este Día Internacional de la Partera nosotros en el UNFPA renovamos nuestro compromiso de colaborar con nuestros asociados a escala mundial y con los países a fin de reforzar las aptitudes y la capacidad de la partería. Instamos a los países a que reconozcan y recompensen a las parteras que trabajan en zonas difíciles y remotas en que sus servicios son más necesarios. Instamos además a los países a que inviertan en la formación de buena calidad, buenas condiciones de trabajo, salarios dignos, normas y posibilidades apropiadas para el crecimiento profesional.

Las parteras son nuestras heroínas y son esenciales para la atención de la salud sexual y reproductiva. Prestémosles apoyo, a ellas y a las mujeres y los recién nacidos que se hallan en el centro de su atención.